La anorgasmia es la incapacidad (mantenida en el tiempo) de lograr un orgasmo luego de haber traspasado la fase de excitación, dentro de una actividad sexual (sola o acompañada).
Es una disfunción sexual que encabeza (junto a la falta de deseo) las problemáticas femeninas más frecuentes.
Anorgasmia primaria o absoluta: es aquella en donde la mujer nunca ha podido alcanzar un orgasmo (tanto en una actividad sexual como en la autoestimulación)
Anorgasmia secundaria: la mujer ha tenido orgasmos en el pasado, pero por alguna razón y de manera sistemática, no los puede conseguir ahora.
Anorgasmia situacional: los orgasmos sólo aparecen en determinados momentos o situaciones. Por ejemplo, es posible conseguirlos en la autoestimulación (sola), pero no con el compañero.
Las mujeres que tienen anorgasmia, en general, tienen un alto grado de ansiedad. Constantemente están observando su propio comportamiento sexual, en algunos casos juzgándose. Por lo general, carecen de fantasía sexuales y se distraen con facilidad (en la actividad sexual). Tienen muy pocos (o nulos) antecedentes de autoestimulación, esto hace que no conozcan bien su cuerpo o sus zonas de placer, por lo tanto en la actividad sexual es probable que no haya una adecuada estimulación clitoridiana. En estos casos, la educación y la terapia sexual son fundamentales para que estas mujeres puedan comenzar a pensar que son merecedoras de placer y que de ellas depende este cambio de posición.