Muchas personas viven su sexualidad como una fuente de placer, mientras que para otras es generadora de conflictos, llamadas disfunciones sexuales. Las disfunciones sexuales son aquellas dificultades que se producen en cualquier etapa del acto sexual (Deseo- Excitación-Meseta-Orgasmo-Resolución) que impide que unx de los integrantes o la pareja disfrute de la actividad.

A lo largo de la vida existen acontecimientos (mudanza/separación/maternidad/paternidad/crianza/duelo/cambio de trabajo, crisis de la edad, etc) que pueden llegar a modificar tu sexualidad y no necesariamente son disfunciones sexuales. Es importante que sepas que estas situaciones seguramente sean transitorias y temporales, no obstante podrían generarte malestar, ansiedad, angustia e incertidumbre, por ello es fundamental que hagas una consulta a tiempo.

En otras ocasiones, las personas consultan a un sexólogo creyendo tener una disfunción sexual, cuando en realidad sólo necesitan orientación y/o información. Por eso, es fundamental que en la primera etapa el profesional realice un diagnóstico para evaluar si la problemática es de indole sexual o si es necesario derivar a un psicólogo o médico.

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